Al menos 21 personas han perdido la vida en Fiji y miles han quedado desplazadas por el ciclón Winston, que causó una gran destrucción a su paso por ese archipiélago del Pacífico sur, donde prosigue hoy el recuento de víctimas y daños.
La última muerte confirmada corresponde a un niño de diez años que murió ahogado en la localidad Nausori, situada a unos 18 kilómetros al noreste de Suva, informó esta tarde la Oficina Nacional de Respuesta a los Desastres.
El primer ministro de Fiji, Frank Binimarama, ordenó el envío de fondos, material y personal a las áreas afectadas.
‘Hay fiyianos ahí fuera sin agua, sin un techo con el que cubrir sus cabezas, sin alimentos y sin los servicios básicos’, afirmó el gobernante durante una reunión con la Oficina Nacional de Respuesta a los Desastres, de acuerdo con una nota de prensa oficial.
Winston visitó Fiji con vientos de 230 kilómetros por hora y ráfagas de 325 kilómetros por hora, además de copiosas lluvias.