El presidente de México, Enrique Peña Nieto, el actor Leonardo DiCaprio y el magnate Carlos Slim han unido fuerzas para salvar a la vaquita marina, una especie que habita en el Golfo de California y que se encuentra en grave peligro de extinción.
El plan rubricado por México, DiCaprio y Slim se propone proteger los ecosistemas marítimos donde habita este cetáceo, endémico del norte del Golfo de California, donde solo quedan una veintena de ejemplares.
La población de esta especie marina ha caído drásticamente por la pesca del tatoaba, un manjar en China, donde se vende a precios de lujo.
Las vaquitas marinas suelen quedar atrapadas en las redes agalleras que capturan a los peces atrapándolos por las agallas y que se usan para esta pesca.
Debido a que los traficantes pagan miles de dólares por un kilogramo de las vejigas natatorias de totoaba, los intentos de frenar su pesca han sido inefectivos, y el número de vaquitas se ha reducido rápidamente.