¿Por qué en las redes sociales hay tanto negacionismo sobre el cambio climático antrópico cuando la ciencia tiene tantas evidencias de su existencia? Responder esta pregunta fue lo que motivó a los investigadores de la Universidad de Brown (EEUU), que analizaron 6,5 millones de tuit para descubrir que un cuarto de los mensajes diarios sobre la crisis climática eran realizados por bots y no por personas reales.
Un bot (aféresis de robot) es un programa informático que efectúa automáticamente tareas repetitivas a través de Internet,que serían imposibles o muy tediosas de hacer para una sola persona. En las redes sociales, los bots se utilizan para simular la interacción humana, incrementando artificialmente el número de visitas o seguidores a una cuenta, o automatizando respuestas para posicionar mensajes o influir en debates. Incluso existen bots conversacionales que simulan una conversación humana utilizando el lenguaje natural.
Los datos preliminares del estudio muestran que en un día promedio, el 25% de todos los tuits sobre la crisis climática provienen de bots. De esos mensajes, el 38% hablaban sobre “ciencia falsa”, y el 28% sobre el gigante petrolero Exxon, empresa que ya es conocida por difundir datos falsificados sobre el cambio climático. Por el contrario, los tweets que podrían clasificarse como activismo en línea para apoyar la acción en la crisis climática presentaron muy pocos bots, alrededor del 5%.
El Boletín de Científicos Atómicos (BAS) ya había alertado hace unos meses sobre que la desinformación generada por la guerra cibernética es una de las nuevas amenazas que ponen en peligro la continuidad de la humanidad. Este nuevo estudio reafirma la peligrosidad de la difusión masiva de los mensajes erróneos, ya que no solo son convincentes para las personas sino que su mera existencia en las redes sociales puede hacer que las personas confíen menos en la información científica.
La influencia de los bots
Para el estudio se examinaron 6,5 millones de tweets publicados en los días previos y el mes posterior a que Donald Trump anunciara la salida de los Estados Unidos de los Acuerdos de París el 1 de junio de 2017.
El actual presidente de ese país constantemente difunde información errónea sobre la crisis climática, llamándola “mentira” y “engaño”, aunque recientemente declaró que acepta que el mundo se está calentando. Sin embargo, su administración desmanteló todas las políticas importantes dirigidas a reducir los gases que calientan el planeta, incluidas las normas de emisiones de automóviles y las restricciones a las centrales eléctricas de carbón.
Hasta el momento no hay evidencia de que los bots de Twitter aumentaran significativamente en torno al anuncio de retirada de EEUU del Acuerdo de París, pero los defensores de la acción para abordar la crisis climática consideran que hubo un aumento en la actividad en torno a las elecciones presidenciales de EEUU a finales de este año.
“Aunque no sabemos quiénes son, ni sus motivos exactos, parece evidente que Trump se nutre del refuerzo positivo que recibe de estos robots y sus creadores”, dijo Ed Maibach, experto en comunicación climática de George Universidad Mason. “Es aterrador reflexionar sobre la posibilidad de que los bots engañaron al Presidente para que cometiera una atrocidad contra la humanidad”.
Twitter y la promoción de noticias falsas
La red social del pajarito tiene varias herramientas que ayudan a que un tuit tenga un mayor alcance, como por ejemplo el “tweet promocionado”, que es la favorita de empresas y marcas que quieren darse a conocer o transmitir un mensaje. Pero hay ciertas limitaciones.
Twitter prohíbe o restringe algunas promociones en sus tuits, como el contenido político, la publicidad del tabaco, del alcohol, de productos y servicios financieros, apuestas de juego y productos farmacéuticos. Pero nada dice sobre los tuits promocionados que difunden falsedades sobre la crisis climática. Por lo tanto, esta red social permite que cualquier tipo de contenido, verdadero o no, sobre la crisis climática pueda obtener una mayor visibilidad si el dueño del perfil está dispuesto a pagar.