Una empresa israelí de tecnología alimentaria acaba de anunciar la apertura de la primera planta industrial del mundo que producirá carne cultivada en laboratorio.
La compañía Future Meat Technologies aseguró que la flamante fábrica tiene capacidad para producir por día unos 500 kilos de productos cárnicos elaborados a partir de células animales, lo que sería un equivalente a unas 5000 hamburguesas.
La planta se encuentra en la ciudad de Rehovot, a unos 50 kilómetros de Jerusalen, y espera llevar sus productos a las estanterías comerciales para el año 2022.
Actualmente, esta instalación está preparada para producir pollo, cerdo y cordero cultivados, sin uso de suero animal o modificaciones genéticas. Próximamente, se producirá en el mismo centro carne de vaca, informa la página de noticias empresariales PR Newswire.
La plataforma recientemente abierta permite ciclos de producción aproximadamente 20 veces más rápidos que la agricultura animal tradicional. Además, se espera que este proceso libre de crueldad animal genere 80% menos de emisiones de gases de efecto invernadero y utilice un 99% menos de tierra y 96% menos de agua que las producciones ganaderas tradicionales.
Y la carne cultivada tiene el mismo valor nutricional que la carne que se produce tras sacrificar animales.
“Nuestro objetivo es hacer que la carne cultivada sea asequible para todos, al tiempo que nos aseguramos de producir alimentos deliciosos que sean tanto saludables como sustentables, ayudando a asegurar el futuro de las generaciones venideras“, dijo al citado medio el profesor Yaakov Nahmias, fundador y director científico de Future Meat Technologies.
La compañía actualmente está en proceso de aprobar su planta de producción con agencias reguladoras en múltiples territorios. Está considerando varias ubicaciones en los Estados Unidos para su expansión proyectada, y espera que en el año 2022 sus productos lleguen a los comercios de diferentes ciudades de ese país.
La carne cultivada se produce a partir de células que se le extraen a los animales vivos, y que luego se reproducen en un laboratorio. Cuando estas células proliferan y se fusionan naturalmente hasta formar estructuras de unos 3 milímetros, que se llaman miotúbulos.
Luego, esos miotúbulos se colocan en un soporte adecuado y, debido a su tendencia innata a contraerse, forman anillos. Este anillo ya se puede considerar carne. Así es que esta carne cultivada no está modificada genéticamente, sino que es producto de la multiplicación in vitro de las mismas células que producen la carne en el animal.
Future Meat Technologies se creó en 2018 y allí se aplican los conocimientos estudiados por el mencionado profesor Nahmias, de la Universidad Hebrea de Jerusalén. Uno de los desafíos de esta compañía, es abaratar los costos de estos productos para los consumidores.
En este sentido, ocho años atrás, la primera hamburguesa de carne cultivada tuvo un costo de 280.000 dólares. Se espera que los productos de esta compañía se vendan a un precio (mucho) más razonable en un futuro no muy lejano. De hecho, Future Meat, en su página oficial, señala que ya produce pechugas de pollo cultivadas por 3,90 dólares.