La Reserva Natural Pehuen Có-Monte Hermoso ingresó oficialmente en la lista tentativa de sitios que podrán ser declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Esta semana, el Director Ejecutivo para el Desarrollo Sostenible (OPDS), Hugo Bilbao, recibió la confirmación que implica dar un paso fundamental en el camino iniciado en el año 2011.
“Celebramos este avance y continuamos haciendo los trabajos, los esfuerzos, tenemos los equipos interdisciplinarios necesarios para la constitución del logro que todos queremos que es que definitivamente la UNESCO reconozca a la Reserva”, sostuvo Bilbao.
“Tenemos la oportunidad que sea considerada como un sitio de objetivo mixto Natural- Cultural, arqueológico, paleontológico y geológico, en tanto que sólo existen 28 de este tipo en todo el mundo en la lista de Patrimonio Mundial. El Gobernador Daniel Scioli impulsó este pedido y avanzamos para que se efectivice”, agregó.
Este sitio que conserva huellas históricas, podría sumarse a otros territorios del país que ya fueron distinguidos como las Cataratas del Iguazú y el Glaciar Perito Moreno.
La Reserva Geológica, Paleontológica y Arqueológica Provincial Pehuén Co Monte Hermoso es un área protegida que contiene impresas las pisadas de megaterios, gliptodontes, mastodontes y macrauquenias entre otros animales del pasado.
12.000 años atrás el mar se encontraba retirado decenas de quilómetros de lo que es hoy es la playa actual. Era un ambiente de lagunas temporales de agua dulce alimentadas por las lluvias y ríos que bajaban de las sierras.
Allí convivían una fauna de mamíferos gigantes nativos de América del Sur, como megaterios, mastodontes, gliptodontes, juntos a especies que aún existen como ñandúes, zorros, guanacos, flamencos, cisnes, etc.
Los limos arcillosos de las antiguas lagunas copiaron de forma sigilosa, las caminatas de 24 especies de animales diferentes, las grietas de sequía, hondulitas del agua, restos vegetales que hoy nos permiten imaginar cómo era el lugar.
En el año 2005 se encontraron huellas humanas en bloques sueltos de la misma roca arcillosa que constituye las capas con huellas de mamíferos y aves. Un tiempo después se descubrió un rastro de 13 pisadas humanas en el mismo nivel que huellas de megaterios.