El fabricante de sistemas de energía FuelCell Energy y el fabricante de automóviles Toyota desplegaron el primer sistema “tri-gen” del mundo que convierte gas residual rico en metano en electricidad, hidrógeno limpio y agua que el gigante automovilístico utilizará en sus instalaciones portuarias del sur de California durante los próximos 20 años.
Las empresas dijeron el jueves que la plataforma de energía en la principal instalación logística de Toyota en Estados Unidos en el puerto de Long Beach, propuesta en 2017 y construida por etapas, está totalmente terminada y operativa.
¿Cuál fue el costo de la construcción?
Está diseñada para convertir un flujo de biogás, procedente de residuos agrícolas y lodos, en 2,3 megavatios de electricidad, 1.200 kilogramos de hidrógeno y 1.400 galones de agua al día, dijo al portal Forbes el CEO de FuelCell Energy, Jason Few. Su construcción costó unos 35 millones de dólares y sólo ocupa el espacio de tres canchas de basket.
“Producimos electricidad neutra en carbono para Toyota, hidrógeno verde y agua”, afirma Few. “Pensamos en nuestra plataforma del mismo modo que en una plataforma de software. Podemos ofrecer una serie de capacidades diferentes, así que sólo es cuestión de qué módulos querés activar. En este caso, activamos tres de ellos para Toyota”.
La finalización de las instalaciones se produce en un momento en que Estados Unidos impulsa un mayor uso del hidrógeno procedente de fuentes que no generen dióxido de carbono.
La energía limpia, una prioridad
California lleva años ofreciendo incentivos a este tipo de proyectos de energía limpia -sobre todo en los puertos del sur de California, que registran una de las peores contaminaciones atmosféricas del país- y la Administración Biden está promulgando nuevos y generosos créditos fiscales federales para el hidrógeno limpio de hasta 3 dólares por kilogramo.
El multimillonario Bill Gates dice que el hidrógeno es una navaja suiza en la lucha por frenar el aumento de las emisiones de gases de efecto invernadero que están cocinando lentamente el planeta, gracias a todas las formas en que puede utilizarse, desde la generación de electricidad, el almacenamiento de energía, la producción más limpia de fertilizantes, amoníaco y acero o como combustible para camiones, coches, barcos y aviones.
Toyota, el mayor fabricante de automóviles del mundo, utilizará el hidrógeno producido por el sistema tri-gen para una flota de camiones Kenworth de pila de combustible que opera en el puerto y para los sedanes eléctricos Mirai de pila de combustible que lleguen ahí en barcos procedentes de Japón.
La electricidad generada por la plataforma se va a utilizar para alimentar todas sus operaciones portuarias y los 200.000 vehículos nuevos que llegan allí anualmente procedentes de plantas extranjeras se lavarán con agua fabricada con el sistema de FuelCell Energy.
¿De qué se trata el contrato de Toyota?
El contrato de Toyota para utilizarla tiene una duración de 20 años y debería eliminar más de 9.000 toneladas de CO2 al año, según las empresas. El exceso de electricidad que no utilice Toyota se transmitirá a Southern California Edison, la empresa local de suministro eléctrico, y se destinará a energía renovable para la red.
A diferencia de las pilas de combustible utilizadas en automóviles y camiones, que producen electricidad a partir de hidrógeno, con sólo agua como subproducto, la plataforma de FuelCell Energy utiliza una pila de combustible de carbonato fundido que funciona a temperaturas de 600 grados Celsius o más.
En el proceso tri-gen también se genera dióxido de carbono, pero Few afirma que se captura y no se libera al aire. En su lugar, se utiliza para aplicaciones comerciales como la producción de cemento o alimentos y bebidas.
Según Few, el sistema construido para Toyota es el primero de su tipo, pero no será el último.
“Creemos que puede utilizarse no sólo en puertos, sino también en otras aplicaciones que requieran energía fiable, hidrógeno y agua. “Por ejemplo, la minería sería una gran aplicación”, dijo, sin identificar otros clientes.