La inteligencia de las abejas vale más de forma grupal que individual, y la abeja reina es el eje central del funcionamiento de esta mente colmena. Sus funciones son insustituibles y, si tienes curiosidad por estos insectos, seguro que muchas de ellas te sorprenderán.
Como pilar fundamental de la organización social de este superorganismo, la reina jerarquiza, repuebla y guía a la colmena.
¿Cuáles son los roles de la abeja reina?
La abeja reina es el único integrante de su casta, dentro de las 3 que se encuentran en la colonia: reina, zánganos y obreras. Sus funciones principales son las siguientes:
- La reproducción: se trata de la única hembra fértil del enjambre, por lo que es la madre de todas las demás. Tras un vuelo nupcial en el que se aparea con los zánganos de la colmena, la reina almacena el esperma en una cavidad llamada «espermateca», lo que le permitirá poner huevos fecundados durante 3-5 años. Los huevos no fecundados —generados por partenogénesis— darán vida a los nuevos zánganos.
- La organización social: la reina emite unas feromonas que afectan a la química cerebral de los otros miembros de la colmena. Con ellas es capaz de provocar sumisión, instar al ataque de un invasor o, incluso, para acicalarla. No obstante, los efectos de estas feromonas siguen en estudio, pues parecen variar de un contexto a otro y aún es necesario un consenso científico.
¿Por qué solo hay una reina?
Las mencionadas feromonas de la reina también tienen un efecto adicional sobre las obreras: inhiben su capacidad reproductora. De hecho, su sistema reproductor no llega a desarrollarse de forma adecuada. De esta manera, se controla la población de la colmena y la tarea de la reproducción recae directo sobre la reina.
De hecho, el único momento en el que hay más de una abeja reina en la colmena es cuando esta empieza a desempeñar mal sus funciones, ya sea por vejez, enfermedad u otro motivo. En ese momento, las obreras empiezan a crear celdas reales —de un tamaño adecuado al de una reina adulta, que es de mayor tamaño— y también alimentan a varias larvas con jalea real para criar nuevas reinas.
¿Cómo se decide quién es la abeja reina?
Una vez que la colonia ha decidido que es el momento de sustituir a la abeja reina, se construyen las celdas reales y se alimenta a las larvas con jalea real, como se ha comentado arriba. En esas celdas, las larvas llegarán a ser abejas de un tamaño más grande, sin órgano de succión y con un abdomen más largo. Su sistema visual es diferente, así como su microbioma gastrointestinal. Así lo expone un trabajo divulgado en PLOS ONE.
La jalea real tiene la capacidad de alterar el ADN de las larvas, convirtiéndolas en este espécimen fértil. Una vez estas larvas llegan a su estadio adulto, lucharán hasta la muerte y la más fuerte pasará a cumplir las funciones de la abeja reina. En el caso de que ya hubiese una, la más joven la expulsará y tomará su lugar.
¿Qué pasa si no hay reina?
Cuando la abeja reina muere antes de que las obreras puedan crear otras, estas últimas, libres de la feromona que inhibe su capacidad reproductora, comienzan a poner huevos al cabo de un tiempo.
En otras ocasiones, la colmena alberga más abejas de las que puede asumir. En esas circunstancias, la abeja reina se marcha de la colmena con parte de sus obreras para construir una nueva colmena en otro emplazamiento. Aquí no se trata de colonia huérfana, pues las obreras tendrían tiempo de criar una nueva generación de reinas y no llegarían a poner huevos.
¿Quién la cuida?
La abeja reina recibe sus cuidados de las obreras. De hecho, nunca llega a probar el polen o a ver la luz del sol, salvo cuando realiza el vuelo nupcial o parte a fundar otra colonia. Ella vive dentro de la colmena y las abejas más jóvenes son las encargadas de traerle alimento, acicalarla y protegerla.
¿La abeja reina da órdenes?
El término «abeja reina» parece indicar que esta figura da órdenes a sus súbditas, como si se tratara de una monarca humana. No obstante, su papel es reproductor y la única influencia que tiene sobre las obreras es a través de sus feromonas.
Esto, la convierte en una pieza clave para la supervivencia de la colonia, pero no le da capacidad de mandato. Las obreras trabajan de manera incansable para mantener la colonia viva y reparar la colmena a través de la división de roles.
Por lo general, la edad de la abeja es lo que determina sus funciones: las más jóvenes realizan tareas dentro de la colmena, donde están más seguras, y las veteranas son las que aventuran en busca de alimento. No obstante, la genética también influye a la hora de organizar las tareas, como se indica en un estudio publicado en la revista Trends in Genetics.
¿Se puede reemplazar a la abeja reina?
En cuanto a sus funciones, la respuesta es no. Ninguna abeja obrera puede ocupar su lugar, aunque comience a poner huevos. Recuerda que la abeja reina posee un genotipo diferente, gracias a la jalea real con la que se alimentó en su etapa larvaria.
Por otro lado, no es posible sustituirla por una reina foránea. Las obreras detectarían su olor y la expulsaría de la colonia, por lo que no lograría quedarse o «conquistar» la colmena.
La única manera de sustituir una abeja reina por otra que realice sus funciones es, como se explicó en líneas anteriores, que las obreras críen a una nueva generación. Esta medida tiene como objetivo garantizar que la colonia perdure.
