En la actualidad, vivimos constantemente en un clima de inseguridad, zozobra e incertidumbre. La violencia se expresa de formas relacionadas entre sí, por lo que diariamente nos vemos sacudidos por hechos dramáticos que nos preocupan y conmueven.
Pero cuando se trata del trato vejatorio hacia los animales es más preocupante, ya que los actos indignos que algunos humanos dan a otros seres vivos indefensos, es un factor que predispone y anticipa la violencia social que, en su escalada, nos arropa y nos alcanza a todos como individuos y como sociedad.
Encontraron un tiburón sobre las playas de Orewa, en Auckland, Nueva Zelanda.
En la soleada playa de Orewa, en Auckland, Nueva Zelanda, un tiburón dejó de existir en sus costas, tras recibir incontables heridas producidas por un grupo de pescadores que lo atrapó deliberadamente con una red antes de arrastrarlo sin piedad hasta la orilla.
En un principio, los espectadores creyeron que el animal se encontraba varado en las aguas poco profundas, en vista de lo cual, varios miembros del público intentaron desesperadamente tirar del escualo con la intención de liberarlo. Sin embargo, nada pudieron hacer, pues el pez yacía muerto hacía minutos, descansando para siempre en las aguas.