Las actividades humanas impactan negativamente la flora y la fauna del balneario El Cóndor, la zona de acantilados donde se haya la Colonia de Loros Barranqueros más grande del planeta y el estuario del río Negro.
Los residuos, incendios intencionales, deforestación, el comercio ilegal de aves, deportes no regulados y el envenenamiento de los loros con cebos tóxicos o agroquímicos son algunas de las acciones que impactan la zona y destruyen el hábitat de las especies que allí habitan.
Existen iniciativas de hace muchos años de la Legislatura rionegrina y del Poder Ejecutivo provincial de creación del Área Natural Protegida “Estuario del Río Negro, Colonia de Loros Barranqueros y Zonas de influencia” para proteger a los loros barranqueros y especies que cuentan con el aval de ONG ambientalistas internacionales.
Por diferentes razones o intereses, hasta la fecha no se aprobaron ninguna de ellas.
Se le pide a las autoridades que concreten la creación del Área Natural Protegida para evitar que se siga dañando la Colonia de Loros Barranqueros que es un patrimonio de la humanidad y el medio ambiente circundante para el beneficio de todos.