Un campesino turco ha matado a un leopardo de Anatolia, una subespecie en grave peligro de extinción de la que no se tenía un encuentro cercano desde hace 40 años, informó ayer la emisora NTV.
Según esa cadena, el campesino disparó al animal cuando este atacaba a un familiar en la provincia de Diyarbakir, en el sureste de Turquía.
Cuando un cazador turco mató en 1974 al que se pensó era el último ejemplar, el felino se creyó desaparecido de Turquía, aunque posteriormente se localizaron huellas y en 2002 se avistó un leopardo vivo en el extremo noreste de Turquía.
En 2010 se hallaron restos de un leopardo muerto en las montañas de la provincia de Siirt, unos 150 kilómetros al este de Diyarbakir.
Según relató el campesino, Mahmut Kaplan, disparó al leopardo con una escopeta de caza al ver cómo el felino atacaba a su primo, ocupado en sacar a pastar el rebaño.
El atacado sufrió heridas en cuello y espalda, de las que fue atendido en el hospital local, de donde fue dado de alta al poco tiempo.
EFE