Una cámara instalada en la reserva Taiaroa Head (Nueva Zelanda), ha captado el inusual y se diría que forzoso aterrizaje de un albatros real.
El ave, que claramente se pasa de frenada, termia con el pico clavado en el suelo, después de realizar una ‘aproximación a pista‘ de los más accidentada.
El emplumado toca tierra a más velocidad de la recomendada y los ‘frenos’ fallan estrepitosamente.
Tras el fuerte impacto, el ave se recupera rápidamente y logra ponerse de pie sin mostrar señales de haberse lesionado. Seguro que el piloto Chesley “Sully” Sullenberger estaba encantado de tenerlo como copiloto en la cabina de su avión.