Para Brian es común que se cuelen animales en las aulas donde da sus clases de matemáticas. Es que la institución adoptó dos gatos que viven en la escuela y son cuidados por todos.
Uno de los chicos de cuarto año del Liceo Avellaneda de Rosario, grabó la tierna escena del profesor con un gatito sentado sobre uno de sus hombros, mientras Brian escribía en el pizarrón.
“Las autoridades fueron a un refugio y adoptaron a dos gatitos que ahora viven acá. Tienen sus cuchas para descansar, están vacunados, tienen sus visitas periódicas al veterinario, entre todos les damos de comer y por sobre todo les damos mucho amor”, contó el docente.
Los animales llegaron hace algunos años al establecimiento y fueron bautizados como “Snarf” y “Tigro”, en honor a la serie “Thundercats”.
Si bien Brian adora a los animales, cuenta que en su casa no tiene mascotas por falta de tiempo. “En la escuela doy clases en los tres turnos, y no estoy nunca en mi casa. Por eso no tengo animales, porque estoy mucho tiempo afuera y pasarían muchas horas solos”.
“Lo importante es concientizar sobre el amor y respeto por los animales”
Tanto a Snarf como a Tigro se los puede ver jugar o descansar sobre el escritorio de Brian, o mezclados entre los 600 alumnos que van a estudiar.
El profesor destaca que al Liceo Avellaneda van especialistas a dar charlas contra el maltrato animal. “Lo importante es concientizar sobre el amor y el respeto por los animales”, dijo.
Es así que ambos gatos ven la puerta abierta de un aula y entran como panchos por su casa. Siempre son bien recibidos tanto por los profesores como por los chicos.
“La verdad es que me gusta tener un buen vínculo con los cursos para desestigmatizar la materia que para la mayoría es un ‘cuco’. Los chicos me filmaron y no me molestó. Disfruto lo que hago. Es mi vocación y no me imagino afuera de un aula”, concluyó.