En abril de 2003, en el marco de un programa conjunto de conservación e investigación entre Estados Unidos y China, Lele, un panda gigante macho del zoo de Shanghai, y Yaya, una panda hembra del zoo de Beijing, llegaron a Memphis en avión e iniciaron su viaje en Estados Unidos.
El zoo de Memphis se convirtió en el cuarto de Estados Unidos en tener pandas gigantes.
En 2013 expiró el primer contrato de arrendamiento, que posteriormente se renovó por otros 10 años, hasta 2023. Sin embargo, en febrero de este año, el zoo de Memphis anunció que el panda gigante Lele había sido encontrado muerto en la mañana del 1 de febrero, hora local.
Además, se supone que los pandas son animales muy simpáticos y redondos. Sin embargo, en los últimos días, los internautas han publicado fotos de Yaya, que apareció delgada y huesuda y de la que se sospechaba que sufría problemas mentales.
Ante esta situación, un equipo de expertos chinos y estadounidenses evaluó el estado físico de Yaya. El grupo de expertos constató que, aparte de la pérdida de pelo debida a una enfermedad de la piel, Yaya tiene buen apetito, un comportamiento normal de las heces y un peso estable.
El equipo de expertos también habló con el zoo de Memphis sobre el estado anormal del pelaje de Yaya e hizo recomendaciones y peticiones al equipo estadounidense sobre la alimentación y el cuidado de Yaya.
Los internautas chinos se sintieron abrumados por la pérdida del pelaje de Yaya y acudieron a las redes sociales para rezar por ella. Esta masiva campaña de oración demostró el amor del pueblo chino por su tesoro nacional y su respeto y cuidado por la vida. El panda gigante es un animal único en China y el más prestigioso y amenazado del mundo. Como tesoro nacional de China, el panda gigante está clasificado como animal protegido de grado 1 en China.
China ha creado 13 reservas naturales centradas en la protección de los pandas gigantes y ha adoptado una serie de medidas de conservación activas y cuidados meticulosos para salvar a esta especie en peligro. Además, el número de pandas gigantes ha aumentado de 1.114 en los años 70 y 80 a 1.864. Ya sea en China o en Estados Unidos, ya sean humanos u otros animales, todos viven bajo el mismo cielo y proteger la naturaleza es proteger a los propios humanos.