Los restos de dos tortugas terrestres fosilizadas, de unos 90 millones de años, correspondientes al período Cretácico Superior fueron halladas el pasado jueves 24 en la costa norte del Lago Barreales.
Según contó el paleontólogo Jorge Calvo, director del Parque Geopaleontológico Proyecto Dino, los dos ejemplares fueron descubiertos por el técnico Juan Mansilla, quien trabaja en el lugar que depende de la Universidad Nacional del Comahue (UNCo). Precisó que los ejemplares estaban inmersos en una roca cementada. Una de ellas con caparazón y plastrón (panza) completo y la otra con un tercio preservado.
Calvo señaló que estos ejemplares que datan del Cretácico Superior se suman a otras 12 tortugas halladas en la zona en los últimos siete años. “En 2015 estábamos realizando exploraciones en la costa norte del lago Barreales para recuperar piezas sueltas de vertebrados, principalmente dinosaurios, y en una roca con forma oval que parecía tener hueso adentro, Juan Mansilla descubrió que correspondía a tres tortugas pegadas, una mediana y dos chicas del Cretácico de 90 millones de años de antigüedad”. explicó.
Agregó que en posteriores excursiones realizadas en 2015 se pudieron rescatar más fósiles de tortugas como así también otros ejemplares en los años posteriores.
Calvo aseguró que hasta ahora “se han podido recuperar 14 ejemplares, muchos de ellos con caparazones completos en un sitio que tiene 20 metros por 20 metros, lo que lo hace aún más interesante. al lugar que se lo ha llamado ‘El tortuguero’”.
Los ejemplares hallados se encuentran en la colección científica del parque paleontológico.
“Ya se han podido recuperar 14 ejemplares de tortugas, muchas de ellos con caparazones completos en un sitio que tiene 20 metros por 20 metros, lo que lo hace aún más interesante al lugar que se lo ha llamado ‘El tortuguero’”, comentó el paleontólogo Jorge Calvo.
Calvo comentó que en el momento del descubrimiento estaban presentes dos estudiantes de la carrera de Paleontología de la Universidad Nacional de Río Negro, Mariana Sarda y Lucía María Gutiérrez. “Las estudiantes habían llegado hasta el parque paleontológico ya que habían solicitado iniciarse en la investigación científica con algunos materiales disponibles. Mansilla sugirió porque no se dan a conocer las tortugas fósiles que ya llevaban siete años esperando su estudio. De esta manera, Mansilla y el geólogo Federico Álvarez comenzaron a preparar algunos ejemplares para detectar caracteres que permitan individualizar su asignación a alguna especie conocida o si se trata de nuevos especies”.
Ese día las estudiantes fueron llevadas por los especialistas donde años atrás se habían descubierto las tortugas con el objetivo de evaluar la geología y el paleoambiente del mismo. Durante la recorrida Mansilla encontró estos dos nuevos ejemplares de tortuga para sorpresa de las estudiantes.
Calvo comentó que la idea es presentar los avances del estudio de las tortugas disponibles en el Museo de Geología y Paleontología de Lago Barreales en las próximas Jornadas Argentinas de Paleontología de Vertebrados a realizarse en mayo próximo en la ciudad de Trelew.
El Parque Geopalentológico Proyecto Dino que dirige Calvo, que en enero pasado cumplió veinte años de actividad, ha dado gran cantidad de restos fósiles como dinosaurios herbívoros de gran porte, huellas de dinosaurios y catorce tortugas. Los estudios que se realizan allí permiten un continuo desarrollo de esta ciencia paleontológica.
“Una pieza más al rompecabezas del ecosistema de hace 90 millones de años”
En mayo de 2015, Juan Mansilla, integrante de Proyecto Dino del Centro Paleontológico Lago Barreales, detectó una extraña roca que sobresalía de las arenas rojizas del lago Los Barreales. El hallazgo resultó ser una familia de tortugas terrestres fosilizadas que corresponden al Cretácico superior.
Lo novedoso fue el estado de conservación de los caparazones, la mayoría estaban enteros, como su disposición. Los especialistas describieron que se trataba de una tortuga grande y dos juveniles, una junto a la otra por debajo de ella, pegadas por sus plastrones (panzas). La disposición de los ejemplares llamó la atención “habla de un movimiento post mortem de los animales”.
Para Jorge Calvo, director de Proyecto Dino, el hallazgo les permite “agregar una pieza más al rompecabezas del ecosistema de esos años. No se trata sólo de dinosaurios gigantes, sino de un montón de especies animales y vegetales”. Los restos de las tortugas fueron encontrados donde ya se han hallado fósiles de grandes dinosaurios como el saurópodo Futalognkosaurus, de 30 metros de largo, y el carnívoro Megaraptor, de hasta seis metros.