Los metales pesados son altamente solubles en agua y no biodegradables, y tienden a persistir indefinidamente cuando se liberan. El plomo (Pb) es uno de los metales pesados mĂĄs utilizados. Su producciĂłn aumentĂł alrededor de un 20% durante la Ășltima dĂ©cada, alcanzando alrededor de 11,7 millones de toneladas a nivel mundial en 2020. Es altamente tĂłxico, incluso en bajas concentraciones, con efectos nocivos sobre los Ăłrganos y tejidos del cuerpo humano.
La biosorciĂłn de metales pesados, entre ellos el plomo, se ha estudiado fuertemente por la ciencia. Ahora, una nueva investigaciĂłn realizada por especialistas del Instituto de TecnologĂa de Massachusetts (MIT) detectĂł que la levadura, un producto de desecho en abundancia en las cervecerĂas, puede filtrar incluso pequeñas cantidades de plomo.
Los investigadores del MIT mencionan en su anĂĄlisis Flint, la crisis del agua en Michigan, Estados Unidos, en 2014, donde la fuente de agua de la ciudad se cambiĂł de un lago a un rĂo y el plomo se filtrĂł de las tuberĂas envejecidas. Sus hallazgos acaban de publicarse en un artĂculo de revista Nature Communications Earth and Environment .
La soluciĂłn estudiada por el equipo del MIT, llamada biosorciĂłn, se conoce desde hace dĂ©cadas. Pero el proceso solo se ha examinado en concentraciones mĂĄs altas, en el nivel de una parte por millĂłn. El MIT dice que su investigaciĂłn muestra que el enfoque puede hacer mella en niveles de contaminaciĂłn de una parte por mil millones. El estĂĄndar de plomo permitido es de 5 partes por billĂłn en la UniĂłn Europea, mientras que la Agencia de ProtecciĂłn Ambiental de EE. UU. dice que ningĂșn nivel de plomo en los suministros de agua es seguro.
La biosorciĂłn utiliza material biolĂłgico inactivo para eliminar los metales pesados del agua. SegĂșn los informes, el equipo del MIT âdemostrĂł que un solo gramo de cĂ©lulas de levadura secas e inactivas puede eliminar hasta 12 miligramos de plomo en soluciones acuosas con concentraciones iniciales de plomo por debajo de 1 parte por millĂłnâ en apenas cinco minutos. âEste trabajo informa por primera vez de este Ăndiceâ, indicĂł Patritsia M. Stathatou, una de las autoras principales de la investigaciĂłn y especialista del Centro de Bits y Ătomos del MIT.
âExplotar la levadura como biosorbente puede ser factible en la prĂĄctica y econĂłmicamente atractivo. La levadura se puede cultivar fĂĄcilmente en grandes cantidades, al mismo tiempo que tiene diversas aplicaciones industriales beneficiosas, por ejemplo, en las relacionadas con la producciĂłn de alimentos, bebidas, productos terapĂ©uticos y biocombustiblesâ, señalĂł Stathatou.
La industria mundial de la fermentaciĂłn utiliza tres millones de toneladas de levadura al año, mientras que se espera que el mercado de la levadura crezca un 35% en los prĂłximos 5 años. âSin embargo, los azĂșcares y las proteĂnas necesarios para el crecimiento de la levadura se derivan de cultivos alimentarios y fuentes que podrĂan usarse para la nutriciĂłn humanaâ, continuĂł la cientĂfica.
âPor lo tanto, para evitar comprometer la seguridad alimentaria, la levadura residual o excedente de las industrias de fermentaciĂłn serĂa una opciĂłn mĂĄs sostenible para la aplicaciĂłn a gran escala de este enfoque de purificaciĂłn de agua. De hecho, el excedente de levadura se produce actualmente en grandes volĂșmenes y es un recurso de bajo valor extremadamente infrautilizado, no adecuado como suplemento dietĂ©tico humano debido a los altos niveles de ĂĄcidos nucleicosâ.
Este proceso aĂșn no puede lanzarse abiertamente al mercado porque, segĂșn advierten los especialistas en su documento, serĂa necesario diseñar un sistema para procesar el agua y recuperar la levadura, incrustando las cĂ©lulas de Ă©sta en una especie de filtro. El MIT estĂĄ trabajando en ello. AdemĂĄs del plomo, el mĂ©todo tambiĂ©n se puede utilizar para eliminar metales pesados como el cadmio y el cobre. âEn general, este trabajo muestra el uso de un biomaterial eficaz para la eliminaciĂłn de trazas de metales pesados, hecho de un microorganismo respetuoso con el medio ambiente, econĂłmico, benigno para la salud humana y fĂĄcil de producir en masaâ, concluyĂł la especialista.