La Comisión Europea aprobó el Plan de Acción de la Unión Europea Contra el Tráfico de Vida Silvestre, un documento en cuya elaboración ha participado la Asociación Nacional para la Defensa de los Animales como miembro de Eurogroup for Animals, asesorando a la Comisión sobre los puntos prioritarios en las que se basa: la prevención, las medidas oportunas para una correcta aplicación y la cooperación internacional.
El comercio ilegal de fauna y flora silvestre ha aumentado exponencialmente en los últimos años, atrayendo la participación de redes criminales organizadas que ven en él un negocio con riesgo bajo y un alto retorno de la inversión.
En consecuencia, está afectando a la conservación de las especies animales y a la integridad ecológica, y pone en peligro la estabilidad económica y política de muchas regiones. Más de 20 mil elefantes y 1.200 rinocerontes murieron en 2014 por culpa del tráfico ilícito de marfil y cuernos respectivamente, y sus poblaciones están cada vez más en declive.
Dado el papel que los Estados miembros de la UE desempeñan como puntos de tránsito y principales destinos de estos productos, y el papel influyente de la Unión en el panorama internacional, ANDA ha abogado por dar alta prioridad al desarrollo e implementación de un plan de acción europeo para acabar con este negocio.
Alberto Díez, director de la ONG, considera que esta decisión ‘permitirá a la Unión Europea dedicar suficientes recursos y atención a un problema central de su política exterior, que afecta a la conservación de la biodiversidad, el desarrollo sostenible, la paz y la seguridad’.