Los investigadores del MIT están trabajando en una idea original colocado en el fondo del mar, por debajo de las turbinas eólicas flotantes, grandes áreas de concreto que garanticen tanto las torres de anclaje y de almacenamiento de electricidad.
El exceso de electricidad que se produce cuando el viento está en su apogeo se utiliza para alimentar una bomba que haría que la esfera del agua de mar que contiene. Cuando la producción del viento se debilitaría, el agua de mar sera admitida en la esfera de nuevo, haciendo girar una turbina conectada a un generador.
La esfera debe ser grande: 30 metros de diámetro, con un espesor de pared de 3 metros para soportar la presión del agua. Su peso asegura el mantenimiento de la esfera en el fondo del mar, incluso cuando está vacío. Según los cálculos de los investigadores del MIT, una esfera de esa naturaleza podría almacenar hasta 6 MWh y 1.000 esferas podría proporcionar durante varias horas la producción una planta de energía nuclear. La electricidad se podría producir en la demanda, con una gran flexibilidad.
