A medida que la energía solar se convierte en una parte más y más grande del paisaje global de energía, los ingenieros de todo el mundo trabajan la manera de construir plantas cada vez más grandes y lo suficientemente eficientes para cumplir con la demanda.
La gigante electrónica japonesa Kyocera está iniciando la construcción de lo que será la mayor planta de energía solar flotante del mundo.
Es el cuarto proyecto de estas características en el que Kyocera ha trabajado, pero promete ser el más impresionante: la instalación se va a construir en la presa de Yamakura al sureste de Tokio, y generará 13,7 megavatios de potencia una vez que se complete en marzo de 2018. Alrededor de 51 mil paneles fotovoltaicos cubrirán 180 mil metros cuadrados de espacio.
Eso es más o menos la misma superficie que 18 campos de fútbol. Según Kyocera la nueva central suministrará energía suficiente para 4.970 hogares medios, lo que supondrá una reducción de 7.411 toneladas de emisiones de CO2 cada año.