El nivel del mar Mediterráneo podría subir hasta 1,9 metros de aquí a 2100, casi un metro más de lo previsto para el resto de los mares del planeta, si persiste la tendencia de aumento de las temperaturas
, señalaron expertos en el IV encuentro de la Red de Periodistas Ambientales de Agencias de Noticias Públicas del Mediterráneo.
El encuentro, que se celebra en la localidad de Marceddi, en la isla italiana de Cerdeña, con periodistas ambientales y científicos de 14 países de la cuenca mediterránea, busca aumentar la sensibilización sobre esos ecosistemas, conocer sus beneficios para las economías locales e interactuar con los diferentes actores, investigadores y expertos.
Alessio Satta, secretario ejecutivo del proyecto MedWet, alertó que la elevación del nivel del Mediterráneo llegará a 1,9 metros en 2100, ‘casi un metro más que la media mundial’, e instó a emprender acciones urgentes para aumentar la resiliencia de estos ecosistemas.
En el mismo sentido, Giovanni de Falco, científico del Instituto Nacional de Investigación (CNR), subrayó que ‘la adaptación de los ecosistemas costeros a la crisis climática dependerá de su resilencia’ para lo que es necesario ‘identificar adecuadamente los lugares vulnerables, preservar aquellos que aún presentan un estado seminatural, dejar que los espacios se adapten a los cambios y dotarse de reservorios de sedimentos que mitiguen la erosión’.
El Primer Informe de Evaluación Científica Sobre el Cambio Climático y Medioambiental en el Mediterráneo del proyecto MedWet, promovido por la Fundación para la Naturaleza MAVA e impulsado por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), presentado recientemente, concluyó que el incremento de la temperatura en la región mediterránea será un 20 por ciento más acelerado que la media.
Esto convierte a los humedales costeros en los espacios más expuestos del mundo a la subida del nivel del mar -hasta 110 centímetros de media- prevista por el panel intergubernamental de expertos sobre cambio climático (IPCC) de Naciones Unidas.
La zona de Oristano, en Cerdeña, es uno de los lugares susceptibles de quedar sumergidos en 2100 y en las poblaciones más amenazadas de esa costa -Marceddì, Oristano, Torre Grande y San Giovanni di Sinis- habitan unas 35.000 personas.
Según la UICN, que impulsó el encuentro, más del 50 por ciento de la población mediterránea vive en zonas costeras y, sin embargo, en los últimos cien años se ha perdido más de la mitad de estos humedales por el turismo masivo, la urbanización descontrolada, el desarrollo industrial y la agricultura intensiva.