La Organización de Naciones Unidas (ONU) pidió hoy “actuar” inmediatamente contra la sequía y la desertificación para evitar “desastres humanos”, en momentos en que varios países europeos afrontan olas de calor inusuales para la primavera en el hemisferio norte.
“El momento de actuar es ya: cada acción cuenta”, dijo el secretario ejecutivo de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (Cnuld), Ibrahim Thiaw, en una conferencia mundial en Madrid por el Día mundial de lucha contra la sequía.
Thiaw sostuvo que “la mitad de la población mundial afrontará una grave escasez de agua en los próximos ocho años” y añadió: “Lo sabemos todos: un número creciente de personas se ven afectadas por la sequía”.
El dirigente de la ONU afirmó que en función de ese escenario es indispensable “poner en marcha sistemas eficaces de alerta precoz y movilizar fondos duraderos para mejorar la resistencia” de las poblaciones a la desertificación, evitando así “desastres humanos”, según la agencia de noticias AFP.
“No hay lugar en la Tierra donde esconderse. Ningún país, rico o pobre, está al abrigo” del problema, advirtió.
Varios países, como Estados Unidos, España, Italia y Francia, están sufriendo olas de calor extremo inusuales para la época de primavera, con temperaturas superiores a los 40ºC.
“Estamos antes temperaturas que ya no son una anécdota“, dijo el presidente del gobierno español, Pedro Sánchez, durante la conferencia, y recordó que estos días se habían alcanzado picos de 43ºC en algunas ciudades de España.
Los países de la ribera del mar Mediterráneo, entre ellos España, se encuentran entre las zonas del mundo más afectadas por la escasez de agua y las consecuencias del cambio climático.
Según el Gobierno español, el 74% del país está en riesgo de desertificación, una situación que implica una importante labor de “planificación”, indicó Sánchez.
Esta conferencia, organizada en Madrid, llega casi un mes después de la COP15 contra la desertificación, que reunió a 7.000 personas en Abiyán, y que se comprometió a restaurar mil millones de hectáreas de tierras degradadas de aquí a 2030 para responder a la “emergencia climática“.
