El río continuó creciendo en las últimas 24 horas en casi toda la costa entrerriana, pero bajó frente a Victoria, en el predelta, a 120 kilómetros al sur de la capital provincial. De todas formas, entre 1.500 y 2.000 necesitarán ser evuacuadas de las zona ribereña.
La ciudad de La Paz, que es la primera localidad de la provincia mesopotámica en sentir los efectos de la hasta ahora moderada crecida del río, tenía hoy un registro de 5,40 metros, una suba de ocho centímetros respecto a la marca de ayer.
En Santa Elena el río acusó esta mañana 5,29 metros, con un repunte en las últimas 24 horas de seis centímetros.
En Hernandarias la profundidad era hoy de 4,80 metros, una suba de cinco centímetros; en Paraná de cuatro metros, creció un centímetro y en el puerto de Diamante el cauce llegó a 4,48, cuatro centímetros más que ayer.
Por el contrario, en Victoria, zona sur de la provincia, donde comienza el predelta, el río alcanzaba hoy una profundidad de 4,10 metros, es decir un centímetro menos que ayer.
Según estimaciones oficiales, en la ribera entrerriana bañada por el río Paraná será necesario evacuar entre 1.500 a 2.000 personas y casi 600.000 animales que pastan en las islas.