El principal afluente del Paraná llegó a los 8,24 metros de altura en el puerto de la capital, a sólo seis centímetros del nivel que marca la evacuación de la zona, según el último registro de Prefectura. Unas 5.000 personas debieron desplazarse de sus casas.
El último informe del Instituto Nacional del Agua (INA) indica que el río no alcanzó su pico máximo de creciente aunque su caudal sigue siendo ‘sostenido y muy alto’.
Además, el nivel del Paraguay en Puerto Pilcomayo, en la ciudad de Clorinda, alcanzó los 7,20 metros este mediodía y se espera un pico máximo de 7,30 metros para la primera semana de julio.
En la ciudad de Formosa, en tanto, ‘el nivel continúa en franco ascenso y se espera un pico de 8,30 metros para la primera semana de julio’, señala el informe.
A raíz de las crecidas los gobiernos provincial y municipal continuaba evacuando a las familias anegadas y las reubicaba en lugares como El Porvenir o el lote 111, en el sur de la capital.
Los barrios más afectados son Bernardino Rivadavia, San José Obrero, Villa 23, Medalla Milagrosa, Villa Hermosa, Santa Rosa, Laguna Sian, San Jorge, San Juan Bautista, El Pucú, Fachini, San Juan I, Villa Belgrano, La Floresta y San Agustín.
El Ministerio de Salud formoseño se ocupaba de brindar atención médica, vacunación, medicamentos, pastillas potabilizadoras de agua, repelentes y anticonceptivos, además de fumigar casa por casa en las áreas afectadas por la crecida del Paraguay.
