Un grupo de propietarios de empresas desagotadoras suspendieron los servicios y cortaron el acceso a los vertederos del Bajo Ayolas y de Granadero Baigorria. Con esa protesta rechazaron el aumento de más del 300 por ciento en el cupo de descarga que Aguas Santafesinas cobra por el uso de las bocas y denunciaron que la firma incumplió con las obras comprometidas para el tratamiento de los líquidos cloacales. Tanto en la zona sur como en el norte de la ciudad, los cortes obligaron al tránsito a desvíos y largas esperas hasta entrada la tarde.
‘Nos pretenden cobrar por un servicio que no prestan’, se quejó Sergio Pino, titular de la desagotadora Los Pinos y portavoz de los manifestantes. Y explicó que si bien hace diez años la concesionaria del servicio de agua ‘se había comprometido a realizar un planta de tratamiento para el vertido de camiones atmosféricos, las obras nunca se realizaron’.
Como consecuencia, ‘todo lo que desechan los vehículos de las desagotadoras, proveniente de cámaras sépticas y pozos ciegos, termina en el río sin ningún tipo de tratamiento’, sostuvo.