La bancada de Juntos ingresó al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza que impulsa la creación de un “Parque Municipal” en la ciudad de Cañuelas destinado a la práctica deportiva y recreativa en un ámbito natural.
La iniciativa indica que deberá estar ubicado en un radio de 5 kilómetros tomando como centro la plaza San Martín; contar con buena accesibilidad; una superficie de 3 hectáreas como mínimo y tener el 50 % de la superficie arbolada con ejemplares añosos.
Añade que el Ejecutivo deberá realizar “un relevamiento de las propiedades estatales y/o particulares que reúnan los requisitos”; y confeccionar “un informe sobre la situación dominial, impositiva municipal y provincial, medidas cautelares que lo graven, y usos actuales de cada uno de los bienes”.
La propuesta no indica ningún lugar concreto, pero a la luz de los requisitos que se mencionan, son muy pocos los lugares del ejido urbano o semiurbano que se adaptan a la propuesta.
El monte de la estancia Las Rosas, más conocido como “Monte Mateo”, con una franja arbolada de 500 x 250 metros de extensión enmarcando un casco histórico podría ser un lugar “potable”. También en el barrio Primero de Mayo o en el San Ignacio, en cercanías del corralón municipal, hay predios extensos y arbolados, pero no mucho más.
“La Organización Mundial de la Salud considera a la superficie de las ciudades destinada a espacios verdes por habitante como un indicador de calidad de vida urbana y recomienda como valor medio de este indicador a la relación de 10 a 15 m2 de espacios verdes por habitante. Las ciudades argentinas se encuentran por debajo del umbral mínimo recomendado. Rosario, por ejemplo, una de las ciudades con más verde urbano en el país, cuenta con 10,4 m2 de espacio verde por habitante, distribuidos en parques (15%), plazas (12%), canteros y bulevares (4%), y otros espacios (3%)” añade la iniciativa.
Si bien el proyecto no lo menciona, el parque Ingeniero Hiriart, en la ciudad de Lobos, es un buen ejemplo cercano. Fue creado en 1918 por quien le da nombre con la idea de dotar al pueblo de un espacio verde, con árboles que protegieran a la población de los vientos del sur.
El lugar elegido fue un antiguo bajo donde se faenaban animales. Hoy es el “pulmón verde” de la ciudad, con sectores de mesas y parrillas, sanitarios, cancha de bochas, juegos para niños, pista de atletismo y ciclismo, el SkatePark “Oscar Arévalo”, el Polideportivo “Fermín Villaruel” y el Estadio Municipal de Fútbol “José Gorga”.
