La Dirección del Parque Nacional Galápagos (DPNG) informó de un aumento en la población de iguanas amarillas en la isla Fernandina, del archipiélago ecuatoriano de las Islas Galápagos, hasta ubicarse en 46 mil individuos.
El estudio lo realizó un equipo de guardaparques del Parque Nacional, bajo el asesoramiento del científico investigador Luis Ortiz-Catedral, quienes evaluaron la densidad poblacional de las iguanas terrestres amarillas (Conolophus subcristatus) en Fernandina, una de las islas más grandes y prístinas del archipiélago.
El trabajo de campo se realizó en 2018 y el equipo de investigadores utilizó la metodología captura, marca, recaptura, en dos periodos distintos en ese año, en las áreas de pre-apareamiento y apareamiento de los reptiles.
Esta acción permitió determinar la densidad de iguanas amarillas en este tipo de hábitat, indicó la DPNG en un comunicado en el que apuntó que posteriormente, se extrapoló esta información a la cantidad de áreas en condiciones similares que tiene la isla Fernandina y se estimó la población.
“Las iguanas terrestres son especies emblemáticas de Galápagos, la función que cumplen en los ecosistemas es importante, ya que su dieta está basada en el consumo de plantas endémicas y esto permite la distribución de semillas, convirtiéndose en ingenieras del ecosistema”, dijo Danny Rueda Córdova, director del Parque Nacional Galápagos.
Añadió que tener una población saludable de iguanas terrestres garantiza mantener la funcionalidad y salud de los ecosistemas para beneficio de toda la biodiversidad que lo conforma.
“Este estudio nos permite refinar estrategias de conservación, ya que nos brinda una referencia de la capacidad de carga para estos reptiles en un hábitat saludable”, señaló.
Las iguanas terrestres de Galápagos pueden vivir hasta 30 o más años, por lo que monitoreos como el realizado ayudan también a formar una base sólida para entender la tasa de reclutamiento de juveniles en la población, dijo Ortiz-Catedral, científico asesor de la investigación.
“Al ser una población en una isla prístina, las iguanas de Fernandina nos permiten entender también la respuesta que tendrían otras poblaciones de iguanas después del control de especies introducidas”, anotó.
La Dirección del Parque Nacional Galápagos recordó que la isla Fernandina la conforma el volcán La Cumbre, uno de los más activos del mundo.
Se trata de la tercera isla más grande del archipiélago con una extensión de 638 kilómetros cuadrados, y alberga una variedad de especies endémicas como pingüinos, cormoranes, y aves terrestres como pinzones.
Las culebras y gavilanes de Galápagos constituyen el principal predador de las iguanas amarillas en sus primeras etapas de vida.
El archipiélago de Galápagos está situado unos mil kilómetros al oeste de las costas continentales de Ecuador y gracias a su rica biodiversidad es considerado un laboratorio natural que permitió al científico inglés Charles Darwin desarrollar su teoría sobre la evolución y selección natural de las especies.
La organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) declaró en 1978 a Galápagos como patrimonio natural de la humanidad.