Marruecos ha reintroducido 120 gacelas dorcas a su hábitat natural en el sur del país más cercano al Sáhara, después de haberlas criado en semicautividad en una reserva, informó el Alto Comisariado de aguas, bosques y lucha contra la desertización.
Dos grupos de gacelas, de sesenta cabezas cada uno, han sido enviados a dos lugares de los que habían desaparecido por la caza incontrolada: Errachidia y Assa, zonas presaharianas cercanas a la frontera con Argelia.
La operación, financiada por la Fundación catarí de investigaciones ecológicas, consistirá en dejar a las gacelas en condiciones de aclimatación durante un tiempo para recoger datos sanitarios y genéticos, antes de su suelta definitiva.
Además, siete de los animales serán equipados con aparatos GPS para poder tener un seguimiento constante de sus movimientos y acciones en las vastas ‘hamadas’ (las pedregosas llanuras saharauis) que constituirán su hábitat.