En la guerra por el zorro rojo no solo están los cazadores y los animalistas. Los científicos han entrado en la batalla a través de un estudio holandés expuesto en un vídeo del canal De re naturae, en el que se pueden ver imágenes de los cánidos y comentarios del veterinario corcubionés Francisco Lema Fuentes, que muestra varios ejemplares de zorro rojo en Corcubión.
El informe pone de manifiesto el papel que juega este depredador en la limitación de la enfermedad de Lyme, que se contrae mediante la picadura de una garrapata y que tienen graves consecuencias para el ser humano. Su incidencia se ha incrementado notablemente en España, sobre todo en la zona norte. Uno de los motivos puede ser el aumento de la afición a salir al campo, para practicar deporte, senderismo, recoger setas o simplemente pasear.
El zorro es un gran depredador de pequeños roedores, que son los primeros huéspedes de las garrapatas (de pequeñísimo tamaño) infectadas por la bacteria borrelia burgdorferi. Su papel, junto con el busardo ratonero y la lechuza común, es el control de los ratones, lo que elimina muchas posibilidades de ser picado por un insecto con la bacteria y, por tanto, contraer una enfermedad que se ha dado a conocer por las personas famosas que la han contraído.
Más de la mitad de los que han sido picados ni se han dado cuenta y los síntomas más graves se presentan meses o años después, lo que dificulta el diagnóstico.
Para el veterinario y naturalista corcubionés, los depredadores como el zorro juegan un papel fundamental como selectores naturales de poblaciones.