Investigadores del MIT desarrollaron un nuevo material que puede almacenar la energía solar durante el día y liberarlo más tarde en forma de calor, siempre que sea necesario.
Se trata de una película de polímero transparente, que se puede aplicar a muchas superficies diferentes, tales como cristales de ventanas, parabrisas o incluso la ropa.
Aunque el sol es una fuente casi inagotable de energía, está solamente disponible cuando brilla en el cielo.
Para que el sol pueda convertirse en un proveedor de gran potencia para las necesidades humanas, tiene que haber una forma eficiente de guardar su energía para su uso durante la noche o en días tormentosos.
La mayoría de estos esfuerzos se han centrado en el almacenamiento y la recuperación de la energía solar en forma de electricidad, pero el nuevo hallazgo podría proporcionar un método altamente eficiente para almacenar la energía del sol a través de una reacción química y liberarla más tarde en forma de calor.