El cambio climático y sus cambios hídricos asociados podrían reducir la capacidad de producción de electricidad en más del 60% de las plantas de energía en todo el mundo desde 2.040 a 2.069.
‘Las centrales hidroeléctricas y las plantas termoeléctricas dependen del agua dulce de los ríos y arroyos’, explicó Michelle Van Vliet, investigadora del Instituto Internacional para el Análisis de Sistemas Aplicados en Austria y la Universidad de Wageningen en los Países Bajos, quien dirigió un estudio al respecto.
‘Estas tecnologías de generación de energía dependen fuertemente de la disponibilidad de agua y de la temperatura del agua para refrigeración, que juega un papel crítico para la generación de energía termoeléctrica’, agregó la especialista.
En conjunto, la energía hidroeléctrica y termoeléctrica contribuyen actualmente al 98% de la producción de electricidad en todo el mundo.
Las proyecciones de los modelos muestran que el cambio climático tendrá un impacto en la disponibilidad de los recursos hídricos y aumentará la temperatura del agua en muchas regiones del mundo.
Un estudio previo demostró que la reducción de la disponibilidad de agua en verano y temperaturas del agua más altas asociados con el cambio climático podrían dar lugar a reducciones significativas en la fuente de alimentación termoeléctrica en Europa y Estados Unidos.
Este nuevo estudio amplía la investigación a nivel mundial, con datos de 24.515 plantas hidroeléctricas y 1.427 termoeléctricas en todo el mundo.