En cerca de 109.655 kilómetros cuadrados se extiende la selva colombiana, la cual representa el 54 % de la totalidad de selvas tropicales existentes en el mundo y es actualmente, sin lugar a dudas, la mayor reserva de recursos naturales del planeta.
Este misterioso lugar acoge tantas especies de fauna y flora como ningún otro ecosistema en el mundo y es un lugar sorprendente no sólo por la diversidad cultural de sus pueblos indígenas, sino por la vida que se origina y se nutre de las múltiples orillas del río Amazonas, que con 6.800 kilómetros de extensión, es considerado junto con el río Nilo el más largo del mundo.
Muchos turistas buscan el contacto con la naturaleza, alejándose de la vida cotidiana en ciudad, aquejada por el ruido, los afanes y el tráfico. El Amazonas ofrece planes y espectáculos únicos a diario, con sólo avistar el río, en el que se encuentran los famosos delfines rosados. Así mismo, por ser un punto donde confluyen las fronteras de tres países: Colombia, Perú y Brasil, el intercambio cultural es valioso como el de las comunidades indígenas Ticunas, Huitotos, Camsás, Yaguas, Nukaks, Tucanos e Ingas. Hacen parte de la diversidad en flora y fauna de la región los osos hormigueros, los monos, los pumas, las aves, los reptiles, los anfibios, los venados, los peces, las Victorias regias, las plantas medicinales, los árboles gigantes; entre otras tantas especies vivas.
Para los amantes del turismo ecológico y de aventura, el Amazonas Colombiano advierte un gran número de actividades como escalar árboles, realizar caminatas en la selva, practicar canopy, navegar por el río Amazonas, visitar las reservas y santuarios naturales, ricas en fauna y flora, o partir en una travesía fluvial hasta lugares remotos en el corazón de la selva.