Natura acaba de lanzar un plan de transición climática para reducir a cero sus emisiones de carbono de aquí a 2030. La empresa ya es neutra en carbono desde 2007.
Este compromiso, conocido como «cero neto / net zero», adelanta en dos décadas los objetivos fijados en el Acuerdo de París. El plan sin precedentes esboza la estrategia para aumentar la resiliencia al cambio climático, con la vista puesta en la justicia climática y la regeneración medioambiental.
Angela Pinhati, directora de Sustentabilidad de Natura, destaca que el plan responde a la urgencia de descarbonizar la economía como forma de mitigar y prevenir el avance de eventos climáticos extremos que ya son evidentes en Brasil, como las inundaciones en Rio Grande do Sul, la sequía en la Amazonia y los incendios que están devastando diversas regiones -en septiembre, São Paulo registró la peor calidad del aire del mundo-.
“Estos eventos son un reflejo directo de la crisis climática y es necesario actuar para revertir este escenario. Por eso, el Plan de Transición Climática de Natura no se centra sólo en la compensación, sino en la regeneración y reducción efectiva del carbono en todas las cadenas de nuestro negocio. Neutralizar las emisiones de carbono era importante hace 20 años, hoy necesitamos dejar de emitir”, afirma.
En este contexto, subraya la importancia de que el sector empresarial se alinee con la agenda global y realice los cambios necesarios en sus modelos de negocio para cumplir con sus compromisos climáticos.
“Sin un plan de descarbonización consistente y acelerado, las empresas acaban trasladando la responsabilidad y las consecuencias de sus emisiones a los consumidores y a la sociedad. En Natura, creemos que es esencial mantener un compromiso real y transparente para garantizar que estamos haciendo nuestra parte para hacer frente a la crisis climática y proteger el futuro de todos”, explica.
Para el plan de transición climática, Natura clasifica sus emisiones en tres alcances. El alcance 1 abarca las emisiones directas de las operaciones de la empresa. El alcance 2 se ocupa de las emisiones indirectas, como las derivadas del consumo de electricidad.
El objetivo de Natura es alcanzar el cero neto en ambas categorías en 2030, lo que representa una reducción del 90% de las emisiones en comparación con 2020. Aunque sigue adquiriendo créditos de carbono equivalentes a las emisiones restantes, Natura se centra en reducir a cero sus emisiones, recurriendo a la compensación del CO2 residual sólo como último recurso.
Para el alcance 3, que requiere un esfuerzo de toda la cadena empresarial, incluidos el transporte y el ciclo de vida del producto, el objetivo es una reducción del 42% para finales de la década. “Sin la colaboración activa de nuestros socios, no podremos alcanzar el cero neto. Por eso es fundamental promover la implicación de toda nuestra red en la búsqueda de soluciones innovadoras”, afirma Angela.
La Alianza Regenerativa, una coalición formada por proveedores de Natura y Avon a principios de este año, es una de las acciones creadas con este objetivo. El grupo ya cuenta con más de 90 signatarios y viene recibiendo formación para reducir las emisiones de GEI en sus cadenas, con acceso exclusivo a proyectos de innovación y a los expertos en sustentabilidad de Natura.
Además, para mejorar la eficiencia y promover la transición energética en sus operaciones directas en América Latina, Natura está implementando una serie de acciones, como la modernización de las calderas para permitir el uso de los llamados combustibles del futuro, como el biometano y el hidrógeno verde, así como la mejora de los sistemas de refrigeración y aire acondicionado, el uso de electricidad de fuentes renovables y la optimización de la flota de vehículos.
La empresa prevé invertir más de 35 millones de reales para reducir el 90% de las emisiones de alcance 1 y 2, en función de la viabilidad de las soluciones en cada región en la que opera.
Transición climática y ciencia
Para descarbonizar sus operaciones con objetivos acordes con el escenario de 1,5 °C del Acuerdo de París, validado por la Iniciativa de Objetivos Basados en la Ciencia (SBTi), Natura también aumentará sus inversiones en agricultura regenerativa, tecnologías verdes, envases sustentables y productos bajos en carbono.
Entre los ejemplos de innovación regenerativa está el SAF Dendê. Situado en Tomé-Açu, Pará, es el primer sistema agroforestal de cultivo sustentable de palma en el mundo. Desde 2008, la superficie se ha ampliado de 18 a 413 hectáreas y pretende alcanzar las 40.000 hectáreas en 2035. SAF Dendê ya suministra aceite de palma a la gama Natura Biōme, que utiliza envases cero plástico.
En el campo de los productos, el plan incluye acelerar las innovaciones bajas en carbono, como el concentrado hidratante Ekos Castaña. Con un 81% menos de plástico en comparación con los recambios convencionales, se envasa en una botella recargable y reduce las emisiones del transporte en un 20%.
En la actualidad, más del 75% del PET utilizado en los envases de Natura es reciclado postconsumo, y el plástico ecológico fabricado a partir de caña de azúcar seguirá siendo una parte esencial de la estrategia de reducción de emisiones.
La justicia climática también ocupa un lugar central en el nuevo plan, con la intensificación de los esfuerzos con las comunidades agroextractivas para garantizar que sus necesidades, derechos y voces se tengan en cuenta activamente en el desarrollo de soluciones climáticas. Para 2030, la empresa espera que el 50% de los créditos de carbono se adquieran en la Amazonia, dando preferencia a las comunidades asociadas que ya suministran bioactivos para sus productos.
“Las consecuencias de la crisis climática son más graves para las poblaciones más vulnerables, que tienen menos capacidad para resistir y adaptarse a sus efectos. Por eso estamos ampliando nuestra concienciación ciudadana y mejorando nuestros protocolos de apoyo en caso de catástrofe, como ya hemos hecho este año en Rio Grande do Sul y estamos aplicando ahora en la sequía de la Amazonia y en las regiones afectadas por los recientes incendios”, añade Angela.
Hasta el momento, Natura ha evitado más de 1,6 millones de toneladas de emisiones de carbono y ha adquirido 4,7 millones de créditos por un importe igual o superior al 100% de las emisiones no evitadas. La estrategia para 2022 fue reconocida en junio de este año con el sello Platino de Integridad del Carbono, otorgado por la Iniciativa Voluntaria de Integridad de los Mercados de Carbono (VCMI). Natura es la primera empresa del sector y la única de economía emergente en lograr este reconocimiento.
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