Las autoridades locales ya han retirado unas cien toneladas de peces muertos en un área de 40 kilómetros de las aguas del río Fuhe, en las afueras de Wuhan, la capital de la provincia de Hubei.
De acuerdo con el periódico “Nuevo Pekín”, muestras de la válvula de drenaje proveniente de la Compañía Hubei Shuanghuan Science and Technology Stock. Co. Ltd mostraron que la concentración de amoniaco por litro del agua drenada alcanzaba los 196 microgramos, por encima del estándar nacional.
El Departamento de Protección Medioambiental de Hubei ha ordenado la suspensión de las operaciones de la planta y que se implanten dispositivos adecuados para el control de la contaminación en sus instalaciones.
El caso ha afectado a toda la comarca de Huanghualao, en el distrito de Huangpi, en Wuhan, atravesada por el río y en el que más de 2.000 pobladores viven de la pesca.
La planta química, con base en la ciudad de Xiaogan (Hubei), cotiza en la bolsa de Shenzhen.
Esta no es la primera vez que se informa del hallazgo de cadáveres de peces muertos víctimas de la contaminación de ríos generada por empresas chinas. En julio de este año, tribunales del sur de China condenaron a prisión a trece personas, entre inspectores de medio ambiente y empresarios de compañías energéticas, por la contaminación por metales pesados de un río, principal fuente de agua potable para 1,5 millones de personas en la ciudad de Liuzhou, en la región autónoma de Guangxi, en 2012.
En otro caso de contaminación reciente, en la ciudad oriental china de Jiaxing, más de 20.000 cerdos muertos fueron lanzados al río Huangpu, principal fuente de agua potable de Shanghái, en marzo de este año.
EFE