La ONG Global Witness contabilizó 116 asesinatos que en un informe que alerta sobre la violencia sufrida por los defensores del medio ambiente.
El año pasado concluyó con 21 víctimas más que en 2013 y Brasil continúa liderando este ranking mundial de violencia ambiental que queda impune con el 25% de las muertes.
Le siguen Colombia (25), Filipinas (15) y Honduras (12) en una lista de 17 países.
Latinoamérica registró 87 asesinatos. Honduras, considerado el país más violento del mundo según la ONU, también mantiene su posición, por quinto año consecutivo, como el lugar con malas asesinatos de activistas per cápita.
Global Witness, que investiga casos de corrupción y abusos en la explotación de recursos naturales, califica las cifras, que pueden ser mucho mayores al no existir datos oficiales, de “dramáticas” y observa “una tendencia alarmante a que algunos Gobiernos usen legislación antiterrorista en contra de activistas, describiéndoles como enemigos del Estado”.