Con las bajas en los índices de turismo, los canales de Venecia están recibiendo visitas de la vida salvaje: una pareja de delfines fueron avistados en el puerto.
El gobierno de Nueva Gales del Sur ha introducido un reglamento a la Ley de Conservación de la Biodiversidad que prohíbe la cría de delfines y la importación de delfines al estado.
Se decidió debido al grave riesgo de desaparición de la especie. Los principales peligros son las capturas accidentales en redes de pesca, la contaminación por mercurio derivada de la minería ilegal de oro y la pérdida de conectividad de los ríos por la construcción de hidroeléctricas.
En lo que va del año un total de 35 delfines franciscanas fueron encontrados varados en playas bonaerenses. Tres de ellos fueron encontrados con vida pero sólo uno se mantiene aún en rehabilitación y con un pronóstico sumamente crítico.
La plataforma ‘Delfines de río’ reúne información clave sobre el tamaño de las poblaciones de estas especies en América del Sur, la información genética y los riesgos que enfrentan en la Amazonia y Orinoquia.