A lo largo de toda su vida ha estado buscando una solución para el problema y por fin ha podido construir un pequeño jardín en donde pueda cultivar sus propios alimentos.
Fue diseñado por el Conicet junto a distintas universidades. El producto, que es apto celíaco y competirá con las leches vegetales, va a ayudar a productores de San Juan.
Cada año se desperdician en el mundo casi un 20% de los alimentos disponibles para el consumo, con un alto costo a nivel medioambiental, social y económico