Elefantes, rinocerontes, pangolines, felinos, reptiles, peces, pájaros y madera de árboles protegidos continúan siendo traficados masivamente alrededor del mundo con un potencial impacto en la salud humana.
Gran parte de los animales silvestres capturados ilegalmente tiene como destino final el mercado de mascotas y/o colecciones privadas. Los principales puntos de venta son ferias, veterinarias y petshops, sitios de e-commerce y redes sociales.