El Jardín Zoológico de Córdoba está cerrado al público desde el 13 de marzo. Pero desde ese día la situación comenzó a complicarse. La empresa concesionaria del complejo, Consultora e Insumos Agropecuarios, abonó en parte los sueldos de los empleados y solicitó a la Municipalidad ayuda para obtener alimentos para los animales. Los trabajadores denunciaron que las especies no reciben la alimentación indicada y por ello el municipio ordenó una auditoría.
La semana pasada, La Voz publicó una nota que daba cuenta de qué protocolo debe aplicarse en el zoológico para atender la actual pandemia de coronavirus. Desde el municipio se afirmó que había 12 empleados y que los animales (1.200) debían tener una especial atención: distancia de dos metros de sus cuidadores y comida en perfectas condiciones de higiene. Sin embargo, esto generó que los empleados manifestaran sus quejas en las redes sociales del diario.
“Trabajo desde hace 13 años, y ahora somos tres, cuatro personas, no hay comida –como dicen– para todos los animales. A los tigres hay que darles carne vacuna, unos ocho kilos a cada uno por día, y les compran apenas dos pollos. No se puede limpiar, está todo dejado desde hace un mes porque los compañeros no dan abasto”, contó uno de los cuidadores, que pidió reserva de su nombre. Teme perder el empleo y necesita que la empresa le complete el pago. “Se van a morir de hambre los animales si siguen así, nadie puede limpiar y es mentira que nos dieron protección, (solo) algunos guantes y barbijos”, agregó.
Otro empleado, que también pidió la reserva de su nombre, dijo que tiene miedo porque hubo varios problemas con los responsables de la concesión. “No nos pagan la ART, ni la obra social, y el sueldo no se completó. Hicimos las denuncias por esto y también en la Policía por malos tratos. Esto venía mal porque no entraba mucha gente y no sabíamos cómo se mantenía todo esto”, dijo. “Los lobos marinos tienen una pileta que nadie limpia. Para las aves recién ahora dijeron que traerían girasol. Todo esto lo hemos hecho saber a las nuevas autoridades municipales y han venido. Ellos saben”, contó el trabajador.
Diego Seery, quien tiene a cargo la concesión del Zoológico, reconoció que el cuadro financiero es complicado por la merma de visitantes desde antes del inicio de la cuarentena, pero negó que falten alimentos para los animales. “Semana Santa y los fines de semana largos siempre fueron los días fuertes de visitantes y este año no los tuvimos. Sí, es cierto que no se completó parte del sueldo de marzo, por lo que estamos tramitando un crédito al Banco de Córdoba, y para el sueldo de abril ya presentamos el pedido para que nos asista el Gobierno”, aseguró.
Respecto de la falta de alimentos y de higiene, rechazó que eso esté ocurriendo. “Lo niego totalmente. No es cierto. Hemos priorizado a los animales y no hemos pagado los salarios. Recibimos muchas especies que llegan de la Provincia, que son de la Municipalidad. No es cierto que no comen. Hemos sí comprado pollo en vez de carne vacuna para los tigres”, explicó.
Aunque aclaró que se pidió asistencia al municipio para la entrega de frutas y verduras y de carne.
Ante este cuadro, La Voz consultó al director de Promoción Ambiental, Enzo Cravero, quien indicó que ayer y hoy se completarán los informes. “Pedimos una auditoría a la Dirección de Impacto Ambiental, a la Patrulla Ambiental y a Policía Ambiental. Lo que hemos comprobado prima facie es que los animales no pasan hambre, pero queremos tener un criterio objetivo”, expresó Cravero.
Cómo es el protocolo exigido
El 11 de abril pasado, el Gobierno nacional envió un protocolo para todos los jardines y centros de atención de animales, en el que exigió un especial cuidado para evitar posibles contagios de coronavirus en esos lugares.
“La primera descripción de Covid-19 ocurrió a partir de personas con neumonía de etiología desconocida que tenían en común haber visitado el mercado local de Wuhan, China, donde se venden animales vivos, silvestres y domésticos, tales como pollos, murciélagos, civetas y serpientes. La sospecha etiológica principal es la transmisión zoonótica del virus (animal-persona)”, se fundamentó en el protocolo.
Además, se detallaron casos en el mundo en los que hubo animales con coronavirus. Entre los más conocidos, un tigre que se contagió de su cuidador en Nueva York.
Desde ese día, el Jardín Zoológico de Córdoba tuvo pedidos expresos de funcionarios para atender el cuidado y la alimentación de los animales. No obstante, el personal se vio reducido y los animales quedaron a cargo de tres a cuatro personas. Algunos trabajadores quedaron impedidos de concurrir al Zoológico por integrar grupos de riesgo.